La música desencadena reacciones físicas especialmente poderosas en las mujeres embarazadas, asegura un estudio difundido en el sitio del centro de investigación alemán Max-Planck-Gesellschaft.
A partir de la semana número 28 de gestación se vio que la frecuencia cardíaca del bebé en el vientre cambiaba al escuchar una melodía que le resultaba familiar
“La música parece tener una influencia particularmente importante en la presión arterial de las embarazadas; es mucho más intensa que en las mujeres no embarazadas”, explican los investigadores.
Originalmente, los científicos creían que el estrógeno desempeñaba un papel al respecto, porque esa hormona tiene una influencia en el sistema de recompensa del cerebro. Este es responsable, entre otras cosas, de las sensaciones placenteras que se experimentan al escuchar música.
Sin embargo, parece que esas respuestas sanguíneas a la música más bien están relacionadas con un acondicionamiento prenatal del feto a la música, pues -a partir de la semana número 28- se vio que la frecuencia cardíaca del bebé en el vientre cambiaba al escuchar una melodía que le resultaba familiar.
“A partir de las 35 semanas de gestación, incluso, hay un cambio en sus patrones de movimiento”, aseguran.
Todos los niños tienen talento musical desde su nacimiento. La
actividad temprana con la música fomenta la creatividad, la capacidad
lingüística y la unión familiar. Padres y niños se inician juntos en el fascinante
mundo de la música mediante experiencias sensitivas y motrices que activan
los canales de aprendizaje.
EMBARAZO (a partir de la semana 24 de gestación)
Las futuras madres deberían cantar a sus
hijos. Sólo en nuestra civilización avanzada y
artificial las embarazadas han dejado de
cantar a sus bebés.
Yehudi Menuhin, violinista
El oído es el primer sentido que se despierta dentro del vientre de la
madre y el canal sensorial que más sentimientos provoca: los elementos
musicales y el sonido de la voz tienen efectos sobre el bebé. Al hablar y cantar
a su hijo, la madre establece una relación íntima con él.
A través de este novedoso programa, la madre disfrutará de un
embarazo armónico y relajado, compaginando la música con ejercicios de
movimiento, respiración y concentración.
En las clases se trabajarán:
- Canciones y poemas adaptados al niño y relacionados con la vida
familiar (hábitos como la comida, el baño, el descanso…)
- Ejercicios de relajación y de respiración de Pilates, Yoga y Qigong
- Ejercicios de estiramiento, fortalecimiento y coordinación para la
espalda
- Ejercicios de fortalecimiento y sensibilización para la pelvis y el suelo
pélvico
BEBÉS (de 0 a 2 años)
En estas clases para bebés, la música se entiende como un medio de comunicación que fomenta la interacción entre padres e hijos y fortalece su vínculo. Se trabaja repitiendo y ampliando los temas principales del programa para embarazadas (el despertar, las caricias, los mimos, el contacto corporal, el baño, comer y beber, dormir, el primer cumpleaños…)
La música, la declamación, el contacto corporal y el juego común crean una atmósfera de confianza, protección y seguridad que ayudan al niño a tolerar y construir relaciones y a descubrir y disfrutar de la experiencia.
En las clases se trabajarán:
- Rituales (canciones y movimientos de bienvenida y despedida)
- Canciones relacionadas con la vida del niño (hábitos diarios, estaciones del año, fenómenos atmosféricos, animales, estados de ánimo…)
- Poemas y juegos de dedos (estimulan partes del cerebro relacionadas con el aprendizaje)
- Descubrimiento libre con la audición de música
- Aspectos musicales (también con la ayuda de pequeña percusión)
Laura Dudley
Si deseas asistir a una de nuestras clases de música para bebés y embarazadas, consulta los horarios en clases regulares.